Hotel Palace (Westin Palace Madrid)

Saludos gatunos amigos. Hoy os voy a “descubrir” uno de los lugares más bellos y con más glamour de Madrid y emblema durante toda su historia, de la vida social capitalina, el famoso y lujoso hotel Westin Palace Madrid, que para los que hemos nacido aquí y lo conocemos desde mininos, siempre será “nuestro” HOTEL PALACE, que por aquello del poder empresarial y económico, ha pasado a denominarse de otra forma. 

Fue creado por iniciativa del rey Alfonso XIII, para dotar a Madrid de un gran establecimiento hotelero de lujo acorde a las necesidades de la capital de España. Abrió sus puertas en 1912 como el hotel más grande y moderno de Europa. Fue edificado sobre un solar de 6.000 m² que ocupaba el antiguo Palacio de los Duques de Medinaceli en pleno, “Barrio de las Letras”, en el centro de la capital. Forma parte de una de las más bonitas estampas que se pueden fotografiar en la ciudad, pues desde un poco más arriba del Congreso de los Diputados, situado frente al hotel, podemos tomar una panorámica que abarque el Palacio de las Cortes, el Hotel Palace, el Museo Thyssen-Bornemisza, la Plaza de Neptuno, el Hotel Ritz, una parte del Museo del Prado, la Catedral de los Jerónimos, el Casón del Buen Retiro y, al fondo, el Parque del Retiro.

El promotor del proyecto, y primer propietario del hotel fue el empresario belga George Marquet, que tomó las riendas en cuanto el rey Alfonso XIII le comentó su idea. El proyecto lo llevaron a cabo el estudio de León Monnoyer y el arquitecto Eduard Ferré i Puig. El solar fue adquirido por 1,5 millones de pesetas y la inversión total ascendió a 15 millones. La primera piedra se colocó el 9 de marzo de 1911 y terminó su construcción el 20 de septiembre de 1912, 18 meses y 11 días después, batiendo todas las marcas de rapidez debido a que utilizaron unos modernos métodos de construcción, totalmente innovadores en aquella época. La inauguración oficial se produjo el 12 de octubre de 1912. El primer huésped del hotel se alojó en la habitación 141, el 21 de septiembre y pagó 7,5 pesetas, el equivalente hoy a cinco céntimos de euro. 

Este impresionante edificio fue un inaugurado con 800 habitaciones, siendo el primer hotel en España y el segundo en el mundo con cuarto de baño en cada una de sus habitaciones, pues se trajeron fontaneros ingleses para esta labor lo que supuso el nacimiento de esta profesión en Madrid. También fue el primer hotel en incorporar teléfonos en todas sus habitaciones y el primer edificio construido con la técnica del hormigón armado. 

De su arquitectura destaca, por encima de todo, la espectacular cúpula de cristal de estilo Art nouveau del hall, centro neurálgico del hotel, realizada por la Casa Maumejean. Está decorada con motivos geométricos de carácter vegetal y arabescos. Tres tapices flamencos del siglo XVII decoran la zona noble así como una lámpara, pieza única, en bronce macizo Art Decó con forma de palmera que hasta el año 1997 colgaba bajo la cúpula y ahora preside la entrada.

Fueron famosos los bailes de media tarde bajo la cúpula, en los llamados “felices años 20”, donde aquí se reunía lo más granado de la sociedad madrileña de la época. Hubo un período muy importante para el hotel, y ese no es otro que el que transcurrió entre 1920 y 1936, pues el Palace era el punto de encuentro y cita obligada de todos los artistas e intelectuales que pasaban por Madrid. Ejemplos tan importantes como Valle Inclán, Josephine Baker, Buster Keaton y Richard Strauss, que se alojaron en el hotel, y otros que lo utilizaron como punto de encuentro y reunión, como Federico García Lorca, Luis Buñuel y Dalí, asiduos al bar del hotel y donde tenían sus interesantes tertulias.

Durante la Guerra civil Española, el hotel fue un hospital militar, donde la cúpula de cristal jugó un papel protagonista ya que permitía realizar las operaciones quirúrgicas aun cuando existía falta de suministro eléctrico. A finales del año 1939, tras una restauración del edificio de más de 4 millones de pesetas (24.000 €) el hotel volvió a abrir sus puertas. Durante los años 40, Salvador Dalí volvió al hotel, ya como huésped, e incluso llegó a pintar un boceto en la pared de su suite, lástima que fue borrado por una camarera de servicio. Por los salones, se podía ver a personajes como Edgar Neville o Miguel Mihura.

En los años de la Segunda Guerra Mundial el hotel fue centro de operaciones de agentes extranjeros y fuente de información para periodistas. En aquel tiempo, comenzó a vivir aquí, en la habitación 383, el escritor, gastrónomo y hombre de mundo, Julio Camba hasta su fallecimiento en 1962. El gran despegue económico de los años 50 supuso la visita al hotel de grandes artistas de Hollywood como Hemingway, Orson Welles, Lauren Bacall, Rita Hayworth, Ava Gardner y un largo etcetera. En la década de los 60, con el boom del turismo, el hotel comenzó a recibir importantes clientes internacionales, entre ellos, los Duques de Windsor, o el magnate italiano Giovanni Agnelli.

El hotel fue propiedad de la familia Marquet hasta el año 1977, año en el que fue adquirido por el empresario Enrique Masó. En 1989 éste lo vendió a la cadena italiana Ciga Hotels, propiedad del Aga Khan. En el año 1995 la cadena Ciga paso a formar parte de ITT Sheraton hasta que en 1997 Starwood Hotels & Resorts adquirió la cadena. Desde el año 2001 está gestionado bajo la marca Westin. En el año 2000 Host Spanish Operating TRS S.L. adquiría el inmueble sin que esto afectara a la gestión del hotel.

Son muchos los acontecimientos históricos que “nuestro” Palace ha vivido entre sus muros, y de los que ha sido principal testigo como sucedió por ejemplo, en 1972, cuando una de las plantas del hotel se convirtió en Embajada de la República Popular China antes de abrir oficialmente su sede en Madrid, coincidiendo con la visita de Henry Kissinger e incluso, se comenta, que este encuentro sirvió para acercar posturas entre Estados Unidos y el país asiático. Otro hito importante sucedió en 1991, cuando el hotel acogió la celebración de la Conferencia de Paz entre árabes y judíos, o en 2001, fecha en que fue cerrado para acoger durante tres días una cumbre con 40 jefes de Estado inaugurada por el Presidente del Gobierno y clausurada por el Rey de España, y donde coincidieron Bill Clinton y Mijail Gorbachov. 

En el plano nacional, también ha sido lugar importante y copartícipe de algunos hechos de nuestra historia pues, durante el golpe de estado del 23 de febrero de 1981, en sus salones se instaló el Gobierno Provisional de la Nación y la sala de prensa de más de 200 periodistas de todo el mundo o, por ejemplo, en el año 82 cuando fue sede de la gran fiesta de la victoria socialista en las elecciones. Posteriormente, en 2004, con motivo del enlace de S.A.R. el Príncipe Felipe con doña Letizia Ortiz, actuales Reyes de España, pero en aquella época, Príncipes de Asturias, el hotel fue una vez más, uno de los establecimientos elegidos para acoger a los ilustres invitados de todo el mundo. El 12 de octubre de 2012 el hotel cumplió su 100º aniversario y lo celebró a lo largo de todo el año con un calendario de actividades artísticas, solidarias y gastronómicas.

A lo largo de su historia, el edificio ha sufrido varias reformas para adaptarse a los nuevos tiempos y dotarle de todas las innovaciones técnicas necesarias. Un ejemplo es la que se realizó en el año 2013, fruto de un ambicioso proyecto, llamado Espacio Palace, que incorporó 1.185 m² de salas para la celebración de eventos, a nivel de la plaza de Neptuno. Este nuevo espacio convirtió al hotel en el centro de conferencias más grande de un hotel de cinco estrellas situado en el corazón de Madrid, ya que cuenta con 2.600 m² divididos en 23 salones independientes, capaces de albergar hasta 800 personas.

Actualmente el hotel se encuentra completamente restaurado y cuenta con 467 habitaciones, 50 de las cuales son suites (1 Real, 17 Ejecutivas y 32 Junior) y el resto, divididas en 109 premium y 309 deluxe, 2 restaurantes, 1 bar y 18 salones de banquetes en la planta noble. Todas las habitaciones están equipadas con las reconocidas “Westin Heavenly Bed” o camas celestiales. El hotel dispone además de habitaciones especialmente diseñadas y equipadas para discapacitados físicos. Todas están decoradas y amuebladas en un estilo clásico y confortable y conservan las puertas originales de madera de caoba. Disponen de un sistema de aire acondicionado individualizado, ventanas con sistema de insonorización y doble acristalamiento, retenedores en las ventanas, caja fuerte, pantalla plana de televisión de 32”, detector de humos y rociadores de agua anti incendios, sistema telefónico digital con buzón de voz personal y sistema de manos libres. Los cuartos de baño han sido diseñados en mármol combinado con el más moderno mobiliario sanitario. Se ha tenido especial cuidado en dar tratamiento ignífugo a todas las tapicerías (cortinas, entelado de paredes, cabeceros de las camas, sofás y butacones, alfombras y moquetas).

La Suite Real está situada en la cuarta planta y tiene una superficie de 160 m², dispone de balcones y una vista impresionante de la fuente de Neptuno, el Casón del buen Retiro y el Museo del Prado. Concebida por el diseñador de interiores más prestigioso de la industria del lujo hotelera, Pierre-Yves Rochon, su inspiración para el proyecto la ha tomado de la historia del edificio, así como de la ciudad. Tiene un dormitorio amplio y lujoso con vestidor y baño con jacuzzi, así como un aseo de invitados. Además cuenta con un gran salón y comedor, bar, biblioteca y la posibilidad de añadir dos habitaciones conectadas alcanzando los 225 m². La suite incluye pantallas de plasma en el dormitorio y sala de estar. Todo en esta suite es lujo y confort.

En 1914 el Ayuntamiento de Madrid premió al edificio como Mejor Construcción de la Ciudad y en 1998 fue declarado por la Comunidad de Madrid, Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento. A lo largo de su historia, el hotel Palace ha contado entre sus huéspedes con lo más ilustre del panorama mundial en todas las disciplinas, pues desde principios del siglo comenzó a recibir personales importantes como Igor Stravinsky, el pintor Pablo Ruiz Picasso, MarieCurie o la mismísima doble espía Margaret Gertrude Zelle (Matahari).

Son muchos los clientes que han pernoctado entre sus habitaciones pero cabría destacar, de una lista interminable, los siguientes: Giovanni Agnelli, Isabel Allende, Príncipe Alberto de Bélgica (actualmente rey Alberto), Richard Attenborough, Príncipe Aga Khan, Príncipe Alberto de Mónaco, Cristóbal Balenciaga, Sarah Bernhardt, Josephine Baker, Jorge Luis Borges, David Bowie, Marlon Brando, José Carreras, Salvador Dalí, Pink Floyd, Glenn Ford, Gary Grant, Vittorio Gassman, John Galbraith, Rita Hayworth, Ernest Hemingway, Michael Jackson, S.M. el Rey Juan Carlos I de España, Buster Keaton, Henry Kissinger, Gary Kasparov, Gina Lollobrigida, Carlos Menem, Rudolf Nuréyev, Peter O´Toole, Pablo Picasso, Octavio Paz, Arthur Rubinstein, Miroslav Rostropovich, Igor Stravinsky, Richard Strauss, Bruce Springsteen, Hugh Thomas, Tensin Gyatso (Dalai Lama), Orson Welles, Alexis Weissenberg, Mario Vargas Llosa, Ignacio Zuloaga, Christian Zimmerman, Jennifer López, Albert Einstei, Marie Curie, Antonio Banderas, Annie Leibovitz, Tommy Hilfiger, Eva Longoria, Naomi Watts, Phil Collins, Paris Hilton, Alicia Kaye, Sharon Stone, Carlota Cashiraghi, Olivia Palermo, Cher, Jane Goodall… Ya digo, lista interminable de personajes de toda casta que han aportado a “nuestro” querido HOTEL PALACE la categoría, la clase y el señorío del que siempre ha hecho gala.

Por último, quiero agradecer infinitamente a Sofía Fuster, de la sección de Relaciones Públicas del Hotel Palace, todas las facilidades y la información aportadas (incluidas las fotografías) para poder llevar a buen puerto este artículo y poder así descubriros un poco más las maravillas que se encuentran entre estas cuatro paredes tan mágicas y distinguidas de nuestra querida ciudad.

Os insto a visitar el siguiente post de este vuestro sitio EL BLOG DE MADRILES  y, no olvidéis que… ¡PASO LISTA! Saludos gatunos

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